Dos leyendas de la música, Paul McCartney y David Byrne, sorprendieron a los fanáticos con apariciones inesperadas en conciertos celebrados anoche, generando un revuelo entre los asistentes y en las redes sociales. McCartney se unió a Bruce Springsteen en Liverpool, mientras que Byrne compartió escenario con Olivia Rodrigo en el Governors Ball de Nueva York, demostrando que ambos artistas, a sus 82 y 72 años respectivamente, siguen siendo capaces de electrizar al público.
En Liverpool, Paul McCartney hizo una entrada triunfal durante el concierto de Bruce Springsteen en el estadio Anfield, donde ambos interpretaron un emotivo dueto que incluyó clásicos como “Glory Days” y “Twist and Shout”. La aparición de McCartney, un hijo pródigo de la ciudad, desató la euforia entre los 45,000 asistentes, quienes no esperaban ver al ex Beatle en el escenario. La colaboración fue un guiño a su encuentro previo en Glastonbury 2022, cuando Springsteen se unió a McCartney en el Pyramid Stage. Horas antes, ambos visitaron el Liverpool Institute for Performing Arts (LIPA), fundado por McCartney, donde compartieron con estudiantes y hablaron sobre la influencia de The Beatles en la carrera de Springsteen.
Mientras tanto, en Nueva York, David Byrne se unió a Olivia Rodrigo durante su presentación en el Governors Ball Music Festival para interpretar una vibrante versión de “Burning Down the House” de Talking Heads. Ambos, vestidos con atuendos rojos coordinados, sorprendieron al público con una actuación llena de energía que se volvió viral en redes sociales. Los fanáticos destacaron la química entre Byrne y Rodrigo.
Estas apariciones se suman a una serie de eventos sorpresa recientes de ambos artistas. McCartney, conocido por sus shows improvisados, realizó tres conciertos sorpresa en el Bowery Ballroom de Nueva York en febrero de 2025, atrayendo a celebridades como Emma Stone, Anne Hathaway y Karlie Kloss. Por su parte, Byrne participó en el concierto del 50 aniversario de Saturday Night Live junto a Robyn, donde interpretaron “Dancing On My Own” y dejaron una marca imborrable con sus trajes inspirados en Stop Making Sense.
Ambos eventos destacan la capacidad de McCartney y Byrne para seguir sorprendiendo y conectando generaciones a través de la música. Los fanáticos especulan sobre futuras colaboraciones y celebran la vitalidad de estas leyendas vivientes.
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